Mis límites corporales se van desdibujando en la ciudad. El perfil va de frente y no es posible mirarme a los ojos. Parece que la lluvia ha calado mi ropa y se deshace en desteñidos de yo misma. Parece que la lluvia... El suelo se va manchando de charcos de colores que huelen a días. El pasado también se ha escurrido y miro hacía un futuro imperfecto que nunca logré memorizar en la escuela. No hay hoy y en los minutos perdidos también se pinta el naranja de mi chaqueta.
Entra en casa, la madeja se enreda por las estanterías y enredará tus tobillos.
En la puerta de mi habitación el viento vuela mis textos.
martes, 10 de abril de 2012
DESDIBUJADA
Mis límites corporales se van desdibujando en la ciudad. El perfil va de frente y no es posible mirarme a los ojos. Parece que la lluvia ha calado mi ropa y se deshace en desteñidos de yo misma. Parece que la lluvia... El suelo se va manchando de charcos de colores que huelen a días. El pasado también se ha escurrido y miro hacía un futuro imperfecto que nunca logré memorizar en la escuela. No hay hoy y en los minutos perdidos también se pinta el naranja de mi chaqueta.
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2 comentarios:
...aguas retenidas en los resquicios de la ciudad.
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